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miércoles, 18 de julio de 2012

Emigrar


Hace tiempo que veo en las noticias que los españoles están emigrando. Sobre todo la gente de entre 20 y 40 años (leo hoy).

También en algunos foros en los que participo, más como observador que otra cosa,  la gente joven sólo hace que hablar de “pirarse”. Algunos de los que ya están fuera son interrogados de forma exhaustiva sobre el devenir de su aventura, sobretodo, laboral. Por lo que explican, son gente muy preparada,  que habla algún idioma, y muchos, del sector de la hostelería. Sobre todo los que están ganándose las habichuelas por Asia.

Todos los que ya están fuera son inquisidoramente preguntados para saber de primera mano las posibilidades de los países de destino, o, mejor, qué país es el más adecuado para emigrar según la profesión o estudios de cada cual.

No me extraña.

La situación aquí pinta bastante negra. El gobierno, con la subida de impuestos y demás medidas no está poniendo las cosas fáciles ni a los empresarios, ni a los emprendedores, ni a la gente que necesita trabajo, que es mucha. Está claro que, como dice un amigo mío, después de la tormenta siempre viene la calma. Pero esta tormenta es, no cabe la menor duda, a largo plazo. Y la gente tiene derecho a emprender las acciones que crea oportunas para ganarse la vida, y labrarse un futuro, por lo que busca entornos más propicios.

Lo de emigrar para el español no es nuevo, como todo el mundo sabe. Y han sido varias las épocas en las que nos tocó buscar y descubrir nuevos mundos. Las situaciones de cada uno de esos momentos fueron provocadas por diversas y diferentes causas, pero la motivación de la gente para emigrar siempre fue, y sigue siendo, la misma. El derecho a una vida mejor. Es universal. Por lo tanto, todos los pueblos emigran por la misma razón. Los españoles también.

No quiero entrar en si la emigración es buena o mala para un país. Pero tengo claro que la persona que emigra de cualquier país del mundo a otro país que no es el suyo, sean en las circunstancias que sean, es un verdadero emprendedor. Un emprendedor valioso.

También lo es la gente que arriesga su vida en una patera, en los bajos de un camión, o que duerme en un parque a la caza de una oportunidad para prosperar. Para ellos pido respeto. El mismo respeto que espero que encuentren nuestros jóvenes allá dónde los lleve el destino.   

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